¿Sabías que las fracturas en los dedos de la mano son la lesión más frecuente en el baloncesto?
El baloncesto es el segundo deporte más practicado en España. Aumentan los deportistas y también lo hacen las lesiones que sufren aquellos jugadores que practican este deporte.
Por ejemplo:
- lesiones en la zona de los nudillos: ligamentosas, tendinosas o fracturas intraarticulares
- fracturas del tendón extensor terminal o del tendón flexor profundo de los dedos
- fracturas en la base del pulgar
- y lesiones del ligamento colateral cubital de la articulación metacarpofalángica
También es habitual sufrir luxaciones o tendinitis en la muñeca, causadas por la repetición de movimientos de flexión y extensión.
Las lesiones más habituales en el baloncesto en los dedos de la mano son las fracturas y las capsulitis.
Suelen producirse en defensa o rebotes, después de un choque o un golpe con el dedo en mala posición que puede producir una fractura. Estas lesiones no tienen por qué ser invalidantes, pero sí afectan al rendimiento. Por ello hay que tratarlas de manera inmediata. Si una lesión, como una tendinitis, no se trata puede agravarse e incluso provocar la rotura del tendón.
El tratamiento dependerá de la gravedad de la lesión. En la mayoría de los casos se suele elegir un tratamiento conservador: antiinflamatorio, fisioterapia y uso de férulas para proteger la zona y ayudar en la recuperación. Solo en casos de fracturas graves se optará por un tratamiento quirúrgico.
Las capsulitis suelen ser provocadas tras recibir un impacto del balón sobre el dedo estirado. Si se quiere seguir entrenando y minimizar el dolor se puede realizar un vendaje, para tratar de evitar la flexoextensión en el dedo afectado.
Tratamiento de la lesión en los dedos
Después de una lesión en un dedo, se aplica hielo para disminuir la hinchazón y reducir el dolor. Esto se hace durante 15 o 20 minutos, cada 3 o 4 horas durante los primeros 2-3 días tras de la lesión.
Podemos probar a elevar la mano para reducir la hinchazón. Y tras descansar unos días, empezar a mover de manera suave los dedos para que la articulación no se ponga rígida.
La mejor manera de mejorar en menos tiempo es evitando el uso del dedo lesionado. El plan de tratamiento siempre se determinará teniendo en cuenta la gravedad de la lesión, pero entre otras cosas, se recomienda tomar analgésicos para aliviar las molestias, inmovilizar el dedo con una férula o poner una cinta al dedo de al lado.
Tras un tiempo de recuperación prudente, la rehabilitación es lo más indicado para recuperar el movimiento completo del dedo lesionado. Puedes empezar apretando una pelota para fortalecerlo o sostener objetos en la mano. No olvides que respetar los plazos de recuperación es uno de los aspectos más importantes para sanar el dedo de forma segura.
¿Cómo puedes proteger los dedos después de una lesión?
Tras una lesión, lo ideal es que proteger al máximo la articulación afectada. Es muy posible que el dolor persista, por lo que debes ser paciente. El proceso suele ser lento, por lo que siempre recomendamos cubrir y presionar tu dedo afectado con una venda elástica adhesiva.
Entre otras cosas, la cinta adhesiva te permitirá sentir menos dolor en la articulación. Además, limitará parcialmente el movimiento forzado que provoca dolor y dará mayor estabilidad a la articulación. No olvides que nunca debes ejercer una compresión excesiva en los dedos afectados.
¿Cómo hacer los vendajes?
Si no tienes mucho dolor puedes aplicar un vendaje únicamente en el dedo afectado. Consiste en cortar dos trozos de cinta por encima y por debajo del dedo afectado. Así permitirás una movilidad global e independiente de todos los dedos de la mano y no afectará a tu rendimiento.
Si tienes mucho dolor y poca movilidad en el dedo, puedes cruzar dos vendas por los laterales del dedo lesionado y cerrar el vendaje con dos pequeños trozos. Es un vendaje más complejo que el inicial y que aportará menor movilidad en las articulaciones.
Si tienes mucho dolor y no puedes mover la falange, puedes unir el dedo afectado con uno de los dedos que tiene al lado con dos pequeñas tiras de cinta que pasarán por encima y por debajo del dedo.
No obstante, si tienes una lesión en los dedos deberás acudir al traumatólogo especializado en mano para revisar el origen de tu dolor. Una vez ahí, se movilizará el dedo afectado para determinar el nivel de inflamación. En la mayoría de los casos, se realizará una radiografía para descartar cualquier tipo de fractura.
En la mayoría de ocasiones, las lesiones solo necesitarán de aplicación de hielo, descanso de la zona afectada y algo de tiempo. Además, proteger los dedos tras una lesión al jugar baloncesto es una de las claves para que el dedo afectado no se resienta y vuelves a recaer de la lesión.